Lo he explicado mil veces, el teatro no es de mis favoritos. Reproducir la cotidianeidad en escena en una transformacion de personajes que se abruman, se enredan, se lasceran nunca llegara a ser (al menos para mi) lo delicioso que puede llegar a ser el cuerpo en movimiento cuando este sin palabras pero si con gestos reflexiona sobre su complejo habitat interior. Dicho esto, debo resaltar que hay teatro y hay TEATRO. Y que hay textos y hay TEXTOS.
MEDEA de Eurípides, es una de esas obras geniales que no perecen en el mundo contemporaneo sino que se vuelven aun mas presentes con el paso del tiempo. La problemática que situa al mundo de Medea en los avatares de la tragedia estan tan presentes hoy como en la mente de Eurípides cuando fue escrita.
Gisela Cardenas, que toma el texto del griego para adaptarlo a un montaje electrizante lleno de angustia y arrebato, lo hace con una maravillosa traduccion que como un poema, flota en el aire de las butacas y queda retorcido profundamente en el corazon de quien lo escucha.
"Cuidado con las mujeres con un plan..." "La justicia cuando llega tarde ya no es justicia" "No dudes ahora, tendrás toda tu existencia para arrepentirte" son solo fragmentos del texto que provocador y penetrante cae en las bocas de Sofia Rocha (absolutamente genial), Magali Bolivar y el coro formado de esplendidas actrices y bailarinas.
La producción es impecable con cambios de escenario que enfatizan el efecto mágico del teatro llevándonos de una casa en ruinas (metáfora del estado "mortis" de Medea) a una sala de gala previa al plan de la hechicera. La iluminación muy pertinente y la coreografia no solo del coro sino de los elementos en escena (como las estructuras/camas) muy rica al crear la atmosfera que empieza a envenenar a Medea.
Es ineludible dejar la sala con reflexiones en la mente pero si de una puedo sopezar la mañana (y posiblemente la noche) es simplemente: ¿Qué cosa habita en el corazón humano para tener la capacidad de bendecir y maldecir al mismo tiempo con el amor?
Vayan a verla. Todo un #mustsee.
MEDEA de Eurípides dirigida por Gisela Cardenas va hasta el 13 de diciembre en el CCPUCP (Av. Camino Real 1075 San Isidro).
MEDEA de Eurípides, es una de esas obras geniales que no perecen en el mundo contemporaneo sino que se vuelven aun mas presentes con el paso del tiempo. La problemática que situa al mundo de Medea en los avatares de la tragedia estan tan presentes hoy como en la mente de Eurípides cuando fue escrita.
Gisela Cardenas, que toma el texto del griego para adaptarlo a un montaje electrizante lleno de angustia y arrebato, lo hace con una maravillosa traduccion que como un poema, flota en el aire de las butacas y queda retorcido profundamente en el corazon de quien lo escucha.
"Cuidado con las mujeres con un plan..." "La justicia cuando llega tarde ya no es justicia" "No dudes ahora, tendrás toda tu existencia para arrepentirte" son solo fragmentos del texto que provocador y penetrante cae en las bocas de Sofia Rocha (absolutamente genial), Magali Bolivar y el coro formado de esplendidas actrices y bailarinas.
La producción es impecable con cambios de escenario que enfatizan el efecto mágico del teatro llevándonos de una casa en ruinas (metáfora del estado "mortis" de Medea) a una sala de gala previa al plan de la hechicera. La iluminación muy pertinente y la coreografia no solo del coro sino de los elementos en escena (como las estructuras/camas) muy rica al crear la atmosfera que empieza a envenenar a Medea.
Es ineludible dejar la sala con reflexiones en la mente pero si de una puedo sopezar la mañana (y posiblemente la noche) es simplemente: ¿Qué cosa habita en el corazón humano para tener la capacidad de bendecir y maldecir al mismo tiempo con el amor?
Vayan a verla. Todo un #mustsee.
MEDEA de Eurípides dirigida por Gisela Cardenas va hasta el 13 de diciembre en el CCPUCP (Av. Camino Real 1075 San Isidro).
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